2010/12/23

¿Qué es lo que quieren de mí, qué es lo que quieren saber? No me verás arrodillado...

Con esta ilustrativa frase de Fito Paez, iniciamos nuestro crónica.


Vaya por delante que de aspectos jurídicos conocemos más bien poco. Pero visto como se están desarrollando las diferentes denuncias del suburbano bilbaíno contra el periodista esto parece que va a acabar como los últimos resultados del Barcelona en la liga.

Pongámonos en antecedentes:


Conflicto Laboral

- 23 de Septiembre de 2010. Julio Ibarra gana la demanda formulada contra Metro Bilbao acerca de su despido. Metro Bilbao debe readmitirle o indemnizarle.

Metro Bilbao la recurre aun sabiendo que el fallo es demoledor.

- 7 de octubre de 2010. Se declara firme la sentencia y se archiva.


Conflicto Penal

- 27 de septiembre de 2010. Metro Bilbao no puede aceptar la derrota y decide dejar la parte laboral a un lado y atacar por lo Penal, presentando una querella por un incendio ocurrido en 2008.

- 6 de octubre de 2010. El Juzgado de Instrucción número 7 de Bilbao archiva la querella interpuesta por la dirección del metro contra Julio Ibarra.

Metro Bilbao no asume la derrota a pesar de que su abogado deja el caso, y pide un aplazamiento para recurirla.

- 26 de octubre de 2010. El fiscal vuelve a solicitar al juzgado que se archive la querella a pesar del recurso.
- 7 de diciembre de 2010. El juzgado de instrucción nº 7 vuelva a cargar contra Metro Bilbao y desestima el recurso interpuesto por el procurador.
Se abre un periodo de 5 días para realziar el recurso de apelación ante la Audiencia Provincial.


Esta es la situación a día de hoy. Julio se encuentra a la espera de saber si Metro Bilbao ha interpuesto o no el citado recurso de apelación. (Incluimos la documentación que hemos recibido).






Ante todo esto queremos subrayar lo siguiente:

1.- A pesar contar con numerosos y consecutivos dictámenes negativos Metro Bilbao sigue obcecado en atacar la imagen de Julio Ibarra. Las declaraciones de sus mandatarios dejan a las claras que lo que se pretende es manchar su expediente de algún modo lanzando acusaciones tendenciosas y de escaso valor contra él.

2.- Los argumentos utilizados en u contra han sido rebatidos y calificados insuficientes o falsos por diferentes estamentos judiciales, pero Metro Bilbao sigue insistiendo en los mismos postulados.

3.- Todo esta actividad judicial no podría ser soportada por un particular o empresa privada. Basta hacer un pequeño cálculo de los honorarios que un abogado de renombre y un procurador cobran por este tipo de contenciosos, valorar su duración en el tiempo y seguramente podamos asegurar que es denunciable que una empresa pública como Metro Bilbao utilice el dinero de todos los contribuyentes para alargar y dejarse llevar en el tiempo una causa perdida como parece ser este caso.

Hoy, 23 de diciembre de 2010. Estamos en vísperas de la Navidades, pero parece ser que el espíritu navideño no hace mella en los gestores del suburbano. Es más que posible que opten por elevar la causa a la Audiencia Provincial lo que podría suponer que su resolución final se demorara más de 18 meses.

Julio no se encuentra parado, a pesar de haberse tomado un respiro, evadirse del ruido que ha producido todo este asunto, nos consta que se está preparando su defensa y que no está dispuesto a esperar 18 meses más para ver su honor restaurado.
En breve tendremos más noticias, en breve esperamos que pueda pronunciarse…